Ubicado en un edificio histórico de gran valor, alberga una destacada colección de piezas sacras, que incluyen pinturas, esculturas, ornamentos litúrgicos y objetos religiosos que datan de diferentes épocas del arte virreinal y republicano. El museo no cuenta con estacionamiento propio; sin embargo, los vehículos pueden realizar la descarga en la calle peatonal cercana al museo. Al inicio del recorrido, los visitantes se encuentran con tres escalones en la entrada, justo después de la boletería. La mayoría de las salas tienen un recorrido sin desniveles, pero algunas presentan escalones o desniveles que pueden dificultar el acceso en ciertas áreas. El museo ofrece tarifas preferenciales para visitantes con discapacidad, haciendo más accesible la experiencia para este grupo de personas.